La fama fácil y la figuración liviana parecen ser los paradigmas actuales en nuestra sociedad. La prueba más palpable es lo sucedido con la joven que atacó a la Ministra de Educación en el episodio archirepetido del famoso “jarrazo”.
Esta seudo heroína, retornó al colegio en medio de una marcha de apoyo con un variopinto grupo de asistentes, que por supuesto vociferaba a los cuatro vientos la inocencia y la consecuencia de esta novel aprendiz de anarquista.
Como era de esperar, la fama mediática de esta joven ha dado para todo, pero sin duda el hecho anecdótico que más ha resaltado todo el mundo, es su inusual segundo nombre, MÚSICA; De acuerdo a los registros oficiales, esta joven se llama María Música Sepúlveda Cavieres.
No obstante tener el apellido de su padre y madre respectivamente, la prensa, en una chapucería inmensa, se ha dado a la tarea en llamarla María música, María música Sepúlveda o simplemente Música.
A lo mejor esto es simplemente un detalle sin importancia, pero en el fondo habla de la forma en que la sociedad arma líderes de opinión, pero que en muchos casos tienen el peso específico de un castillo de naipes.
La niña María Sepúlveda Cavieres, a mi parecer, no es más la fiel representante de una sociedad intolerante y que no acepta opiniones contrarias; representa lo que muchos Chilenos han cuestionado en nuestra historia reciente, es decir, que la ideas no se impongan por la fuerza de la razón sino por la consecuencia de la violencia y la intolerancia; después de todo, se ha alegado que esta niña no puede ser castigada debido a su juventud, entonces si es así porqué los adultos avalan sus opiniones y actuaciones respecto a la educación si ni siquiera ha completado su enseñanza media…..la respuesta para mi punto de vista es muy fácil….esta seudo-heroína no es más que otra joven con ideales pero de escasa madurez para juzgar su realidad…y evidentemente fue utilizada por muchos adultos entre ellos el presidente del Colegio de profesores….incluso ha contado con la complicidad de la propia ministra de educación, quien en una actitud facilona y políticamente correcta, está contribuyendo a crear esta imagen de papel de una supuesta líder de la juventud.
Sería muy importante que también resaltáramos a los muchos jóvenes escolares que participan en ferias científicas, en competencias de debate, de matemáticas, en talleres culturales, en orquestas juveniles, en acción social, etc, etc…..no es justo ni ayuda en nada a nuestra educación que la opinión pública le de tanta cabida a jóvenes de comportamiento irracional en desmedro de aquellos que se esfuerzan por llegar a ser mejores profesionales en el futuro…no necesitamos más candidatos a politiqueros…de eso ya tenemos muchos en nuestra fauna política.
No porque un o una joven se llame Juan Palo de escoba, o Claudia Matemáticas la prensa y la opinión pública va a caer a sus pies ante el menor gesto de violencia.
Esta seudo heroína, retornó al colegio en medio de una marcha de apoyo con un variopinto grupo de asistentes, que por supuesto vociferaba a los cuatro vientos la inocencia y la consecuencia de esta novel aprendiz de anarquista.
Como era de esperar, la fama mediática de esta joven ha dado para todo, pero sin duda el hecho anecdótico que más ha resaltado todo el mundo, es su inusual segundo nombre, MÚSICA; De acuerdo a los registros oficiales, esta joven se llama María Música Sepúlveda Cavieres.
No obstante tener el apellido de su padre y madre respectivamente, la prensa, en una chapucería inmensa, se ha dado a la tarea en llamarla María música, María música Sepúlveda o simplemente Música.
A lo mejor esto es simplemente un detalle sin importancia, pero en el fondo habla de la forma en que la sociedad arma líderes de opinión, pero que en muchos casos tienen el peso específico de un castillo de naipes.
La niña María Sepúlveda Cavieres, a mi parecer, no es más la fiel representante de una sociedad intolerante y que no acepta opiniones contrarias; representa lo que muchos Chilenos han cuestionado en nuestra historia reciente, es decir, que la ideas no se impongan por la fuerza de la razón sino por la consecuencia de la violencia y la intolerancia; después de todo, se ha alegado que esta niña no puede ser castigada debido a su juventud, entonces si es así porqué los adultos avalan sus opiniones y actuaciones respecto a la educación si ni siquiera ha completado su enseñanza media…..la respuesta para mi punto de vista es muy fácil….esta seudo-heroína no es más que otra joven con ideales pero de escasa madurez para juzgar su realidad…y evidentemente fue utilizada por muchos adultos entre ellos el presidente del Colegio de profesores….incluso ha contado con la complicidad de la propia ministra de educación, quien en una actitud facilona y políticamente correcta, está contribuyendo a crear esta imagen de papel de una supuesta líder de la juventud.
Sería muy importante que también resaltáramos a los muchos jóvenes escolares que participan en ferias científicas, en competencias de debate, de matemáticas, en talleres culturales, en orquestas juveniles, en acción social, etc, etc…..no es justo ni ayuda en nada a nuestra educación que la opinión pública le de tanta cabida a jóvenes de comportamiento irracional en desmedro de aquellos que se esfuerzan por llegar a ser mejores profesionales en el futuro…no necesitamos más candidatos a politiqueros…de eso ya tenemos muchos en nuestra fauna política.
No porque un o una joven se llame Juan Palo de escoba, o Claudia Matemáticas la prensa y la opinión pública va a caer a sus pies ante el menor gesto de violencia.