Había una vez un pueblecito muy pobre, ubicado al sur, muy al sur. En ese pueblo vivía una familia llamada los Chilenos, y su jefa de hogar era misiá Micaela….una de apellido medio franchute.
Las casitas de este pueblo eran muy pobres, con muchos hoyitos en su techumbre y como buenas familias pobres no pusieron mucho empeño en repararlas.
Este pueblecito que llamaban Villa América empezó a sufrir un invierno muy terrible…..hubo preocupación en la gente del pueblo…todos se pusieron a pensar como cuidarse el invierno que se les venía, pero misiá Micaela estaba distraía en otros quehaceres así es que no le dio mucha importancia al tema.
Lamentablemente la lluvia llegó, y el encargado de arreglar el pobre techo, que se llamaba ño´ Andrés, al que le decían el Vela por su apellido, no quiso repararlas…decía que no tenía platita..que le daban miedo las alturas…..que no quería mojarse…vaya uno a saber porque no hizo nada.
Lo que todos suponían que iba a pasar….pasó……llegó la lluvia….mucha lluvia……y la familia de misiá Micaela se mojo todita, todita….algunos que eran más apilchados se pusieron sus ponchos y de esa manera capearon mejor el chaparrón, pero el resto no pudo….así es que ellos se enfermaron…unos más leves otros más graves…….
Lamentablemente misiá Micaela, como no cachaba mucho del tema, nunca reprendió a ño´andrés….y para apoyarlo, su amigo Don Emu…le decían así por su nombre…se acordó de un dentista que una vez lo atendió y que le dejó mucho dolor..y en esa oportunidad le dijo, Edmundito, para que no te duela, aprieta los dientes….y Edmundito le agradeció y le dijo que a partir de ese día siempre se iba a acordar de ese sabio consejo.
MORALEJA: No hay que darle la responsabilidad de cuidar la casa a ño´Andrés…..dicen que es mucho mejor pa´las aulas…..pero para manejar los pesitos de la casa…mmmmmmmmm
Las casitas de este pueblo eran muy pobres, con muchos hoyitos en su techumbre y como buenas familias pobres no pusieron mucho empeño en repararlas.
Este pueblecito que llamaban Villa América empezó a sufrir un invierno muy terrible…..hubo preocupación en la gente del pueblo…todos se pusieron a pensar como cuidarse el invierno que se les venía, pero misiá Micaela estaba distraía en otros quehaceres así es que no le dio mucha importancia al tema.
Lamentablemente la lluvia llegó, y el encargado de arreglar el pobre techo, que se llamaba ño´ Andrés, al que le decían el Vela por su apellido, no quiso repararlas…decía que no tenía platita..que le daban miedo las alturas…..que no quería mojarse…vaya uno a saber porque no hizo nada.
Lo que todos suponían que iba a pasar….pasó……llegó la lluvia….mucha lluvia……y la familia de misiá Micaela se mojo todita, todita….algunos que eran más apilchados se pusieron sus ponchos y de esa manera capearon mejor el chaparrón, pero el resto no pudo….así es que ellos se enfermaron…unos más leves otros más graves…….
Lamentablemente misiá Micaela, como no cachaba mucho del tema, nunca reprendió a ño´andrés….y para apoyarlo, su amigo Don Emu…le decían así por su nombre…se acordó de un dentista que una vez lo atendió y que le dejó mucho dolor..y en esa oportunidad le dijo, Edmundito, para que no te duela, aprieta los dientes….y Edmundito le agradeció y le dijo que a partir de ese día siempre se iba a acordar de ese sabio consejo.
MORALEJA: No hay que darle la responsabilidad de cuidar la casa a ño´Andrés…..dicen que es mucho mejor pa´las aulas…..pero para manejar los pesitos de la casa…mmmmmmmmm
1 comentario:
Excelente tu blog.
En cuanto al artículo...ufffff... así como vamos.... en tiempos de la UP había que "apretarse el cinturón"... ahora... es "apretar los dientes"... estamos mal!!!!
Saludos.
P.D. Me llevo este post a mi Facebook.
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